Análisis de la estructura, la dinámica familiar y el comportamiento de infracción de normas en adolescentes de Bogotá


Trabajo de Investigación, 2017

29 Páginas


Extracto


Indice

Resumen

Abstract

INTRODUCCIÓN

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

MARCO TEÓRICO

OBJETIVOS

METODOLOGÍA

Discusión de resultados

ANÁLISIS DE LOS RESULTADOS CUANTITATIVOS

CONCLUSIONES

SUGERENCIAS

Bibliografía

Resumen

Varios factores se han asociado con la delincuencia y el comportamiento infractor de normas; entre ellos se encuentra el entorno familiar. En esta investigación se ha querido evidenciar si existe algún tipo de relación entre la estructura y dinámica familiar y el comportamiento infractor de normas. Para ello, los investigadores se han basado en una amplia bibliografía, especialmente psicoanalítica, que describe cinco características de la estructura y dinámica familiar (abandono infantil, sobreprotección, falta de socialización, ausencia de normas y sobreexcitación infantil) que estarían relacionadas con tres tipos de comportamiento infractor de normas en los adolescentes (comportamientos agresivos, comportamientos sexuales no normativos y comportamientos disruptivos asociados a la angustia de separación). Se realizó una investigación de tipo mixto, con una fase cualitativa en la que se encuestaron 674 jóvenes escolarizados en Bogotá, entre 12 y 16 años, y con el instrumento tipo encuesta se correlacionaron las dos variables antes mencionadas.

En la segunda fase cualitativa se analizaron el discurso y las historias de vida de 28 niños y jóvenes institucionalizados en operadores del ICBF en la modalidad de programas de restitución de derechos para evidenciar a la luz de las teorías objetales psicoanalíticas si existe o no dicha relación. En la fase cuantitativa se encontró una correlación positiva media de 0.44 entre las dos variables. En la fase cualitativa se evidenció que las categorías de abandono infantil, falta de normas en casa y sobreexcitación infantil están vinculadas con el comportamiento infractor, especialmente de tipo agresivo. Las categorías de sobreprotección y falta de socialización no parecen tener ningún tipo de relación.

Palabras claves: comportamiento infractor, delincuencia juvenil, comportamientos agresivos, sobreprotección, abandono infantil, falta de socialización, sobreexcitación, abuso sexual, suicidio juvenil, agresividad infantil.

Abstract

There are different the factors that have associated with the delinquency and behaviors who go against the law, among the mentioned factors, there is the family environment. The aim of this research is to show if there is a relation between the dynamic and structure family and the misbehavior. In order to demonstrate this, the researchers have used a wide bibliography, especially psychoanalytic which describes five characteristics of family structure and its dynamics (child neglect, overprotection, lack of socialization, absence of rules and child over-excitation) that would be related to three types of teenagers misbehavior (aggressive behaviors, unacceptable sexual behaviors and disruptive behaviors associated with separation anxiety). A mixed research was carried out, with a qualitative phase where 674 students in Bogotá between 12 and 16 years old and with the instrument type survey, the two variables mentioned above were correlated. The second qualitative phase aimed to analyze the discourse and life histories of 28 children and teenagers subscribed to restitution programs of rights in the ICBF to show the light of psychoanalytic theories, whether or not such a relationship exists.

In the quantitative phase, it was found that there is an average positive correlation (0.44) between the two variables. In the qualitative phase it was evidenced that the categories of child neglect, lack of home rules and family over-excitation seem to be related to the misbehavior, especially of an aggressive way. The categories of over-protection and lack of socialization do not seem to have any kind of relationship.

Key words: Misbehavior, young delinquency, aggressive behavior, overprotection, child neglect, lack of socialization, child over-excitation, sexual abuse, young suicide, child aggressiveness.

INTRODUCCIÓN

En las escuelas colombianas resulta habitual hallar niños y jóvenes que difícilmente se adaptan a la institución. Bajo rendimiento académico, comportamientos auto y heteroagresivos, frecuentes problemas de convivencia, dificultades para asumir responsabilidades y otras tantas dificultades que afronta una importante parte de los estudiantes, llevan a interrogarse acerca de las formas de relación temprana que tuvieron en el seno de su familia.

De acuerdo con la investigación “Estudio nacional de consumo de sustancias psicoactivas en adolescentes en conflicto con la ley en Colombia, 2009” realizada por Naciones Unidas, Oficina contra la Droga y el Delito, se ha estimado que entre los adolescentes y jóvenes existe una elevada prevalencia delictiva de hasta el 80 %, pero circunscrita generalmente a conductas leves (Carvajal, C. A., Fagua, J. C., & Zamudio, E. G., 2010).

En los casos más graves, estos jóvenes infringen la ley, lo que hace necesario su traslado de una institución educativa regular a programas especiales del Gobierno para jóvenes infractores. Uno de estos programas del Estado está enmarcado en la restitución de derechos del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) que, según la Ley de Infancia y Adolescencia (1098 de 2006) vela por restablecer los derechos vulnerados a los niños, niñas y adolescentes y propicia su capacidad para ejercerlos con dignidad e integralidad.

Con el significativo aumento de ingresos de jóvenes al programa, surge el cuestionamiento acerca del papel de la familia en este fenómeno. De allí nace la necesidad, expresada en esta investigación, de indagar acerca de los factores familiares (entre muchos otros como la pobreza y los valores sociohistóricos que no se pretenden desconocer) que pueden contribuir a que los adolescentes infrinjan las normas, y a partir de allí generar herramientas que permitan mitigar esta situación y contribuir al armónico desarrollo del papel familiar como base y centro de la sociedad.

Esta investigación, si bien reconoce la imposibilidad de adjudicar como causa de los comportamientos delictivos, la estructura y la dinámica familiar, pretende presentar un análisis sobre esas primeras relaciones de los seres inmediatos en la primera infancia y su resultado en la formación del ser humano. Se utilizaron la entrevista y la encuesta como herramientas metodológicas. Se realizaron encuestas en centros educativos de Bogotá y entrevistas en profundidad en instituciones que albergan adolescentes en programas de restitución de derechos.

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

El advenimiento de la democracia a la mayoría de rincones del planeta, la finalización del patriarcado, la laicidad de los estados, la occidentalización del mundo, la llamada globalización, los derechos humanos y, especialmente, la aceptación y ejercicio de nuevas formas de constituir familia, conllevan sin duda a dar pruebas del llamado progreso y desarrollo de la humanidad (Wallerstein, 2006). Los cambios en las estructuras familiares han generado, entre muchas otras consecuencias, inestabilidad, crisis y reacomodaciones, y han producido en ellas nuevos contenidos normativos, funciones y límites que han afectado las relaciones que se establecen internamente y que traen consigo un cambio en la conducta de quienes están en continuo crecimiento y una variación significativamente drástica en el papel de quienes tienen la misión de educar (Proia, 2011).

El orden social de antaño, caracterizado por su estructura patriarcal jerárquica, rígida y altamente restrictiva, garantizaba en cierta forma una constitución familiar que fomentaba en los niños y niñas que crecían en ellas un comportamiento de respeto de normas que en psicoanálisis se denomina estructura neurótica. Por el contrario, los cambios actuales en el orden mundial, la caída del patriarcado, la democracia y demás avances que, sin duda, son muestras de nuestro desarrollo como civilización humana, que traen un sinnúmero de beneficios (derechos humanos, libertad, calidad de vida, etc.), han modificado nuestras formas de hacer familia y, por ende, los comportamientos de los niños y niñas que crecen en las familias del siglo XXI. Algunas de estas nuevas familias generan, según el psicoanálisis objetal (Bion, 1999; Winicoot, 1972; Rousillon, 1991), individuos más propensos al irrespeto de las normas, o quizá sería más correcto decir individuos con menor capacidad para el respeto de normas. Por supuesto, cabe aclarar que las diversas estructuras familiares actuales también generan seres humanos con mayor aceptación de la diversidad, con gran autonomía sobre sus vidas y metas más altas; sin embargo, algunas dinámicas de estas estructuras familiares nuestras, según el psicoanálisis, podrían estar relacionadas con dificultades en el seguimiento de normas.

Es preciso cuestionarse sobre cuáles son los factores que inciden para que el comportamiento infractor de normas se dé, lo cual genera situaciones o consecuencias, problemas para la comunidad estudiantil en general, que se ven reflejadas en la sociedad, el colegio y la familia. De allí la importancia de desarrollar un estudio que no deje sólo avances investigativos, sino que ayude a entender por qué se presenta esta situación en los adolescentes. Además, esto les brindará a las instituciones educativas y de restitución de derechos una serie de estrategias que posibiliten la extinción o disminución de las conductas, mediante una propuesta para el control de las conductas inadecuadas. Contribuir al conocimiento científico de los factores que inciden en la infracción de normas generará herramientas para que institucionalmente se fortalezcan las pautas de crianza y se brinde una adecuada atención que ayudará a mejorar el desarrollo integral de las adolescentes.

Teniendo en cuenta la relación entre globalización y nuevas formas de hacer familia, y la que existe entre ésta y el comportamiento de infracción de normas de nuestros niños, niñas y jóvenes, nos preguntamos: ¿qué relación existe entre las estructuras y dinámicas familiares con el comportamiento infractor de normas en adolescentes de 12 a 16 años, escolarizados o institucionalizados en Bogotá?

MARCO TEÓRICO

Desde un análisis de las teorías posfreudianas objetales (lo que se ha llamado la escuela inglesa de Klein, Winnicott, Bion), se puede abstraer cinco estructuras y dinámicas familiares que generarían posibilidades de que el niño no estructurara su psique de forma neurótica, es decir, cinco condiciones familiares que generan funcionamientos límites y, por supuesto, propensión a dar salida a sus pulsiones por medio del acto. Estas cinco condiciones se han titulado de la siguiente manera: 1) indisponibilidad objeto primario, 2) objeto primario absorbente, 3) objeto castrante débil o ausente, 4) carencia de objetos sustitutos y 5) pulsiones desbordadas.

1. Indisponibilidad del objeto primario

Para las teorías objetales es primordial la relación con el objeto primario (ver relación con el objeto y relación al objeto de Winnicott en juego y realidad), entendiendo el objeto primario como aquel vínculo, aquel apego primario que establece un ser humano, e inaugura una primera relación de deseo (usualmente la madre). En muchas ocasiones, chicos que pasan de un hogar a otro, de una institución a otra, de un cuidador a otro, no logran establecer este primer apego seguro y estable.

2. Objeto primario absorbente

En el otro extremo, tenemos objetos primarios que ofrecen un apego estable pero absorbente, y hacen que el sujeto permanezca en una etapa autista (en palabras de Malher). El sujeto, si bien necesita la disponibilidad del objeto primario, también requiere que éste le permita separarse parcialmente de él, para poderse interesar por otros objetos sustitutos.Esto lo vemos en familias muy sobreprotectoras.

3. Carencia de objetos sustitutos

Como se puede apreciar, no sólo es importante que en estas condiciones preedípicas el sujeto cuente con un objeto primario estable y seguro, y que no sea absorbente sino que existan otros objetos, con los cuales el niño pueda paliar su pérdida (del objeto primario). En este punto es importante, en palabras de Roussillon, el objeto maleable, y según Winnicott el objeto transicional, que permita el paso del objeto primario al objeto sustituto.

4. Debilidad o ausencia del objeto castrante

Desde Freud se conoce la importancia del objeto castrante. Aquella función paterna de prohibición e identificación en el complejo de Edipo. El objeto castrante es el que impide el acceso al objeto primario y, a la vez, le permite una identificación, una ilusión de ser algún día como él (ideal del yo).

5. Pulsiones desbordadas

Algunos niños viven desde su más tierna infancia eventos que desbordan y sobreexcitan sus pulsiones (ver confusión de lenguas de Ferenczy). Este desbordamiento de las pulsiones impediría que el sujeto se frustre y renuncie al objeto primario.

Cuando alguna de estas condiciones se presenta, se generan graves desórdenes en la personalidad, lo cual impide la neurotización y, por ende, la mentalización del conflicto. Desde ese punto de vista, el conflicto no se juega en el nivel mental (neurosis) sino en el comportamental (estados límite). El acto le serviría al sujeto para escapar al compromiso del complejo de Edipo, aquel de respetar la ley paterna. Desde ese punto de vista, las llamadas patologías del comportamiento obedecen a una estructura que no puede jugar el conflicto por medio de significantes, sino que lo hace por medio de actos para romper las normas (infracción) y así asegurarse de no ser castrado (aceptación de la ley paterna).

OBJETIVOS

OBJETIVO GENERAL

Analizar posibles relaciones entre las dinámicas y estructuras familiares con el comportamiento infractor de normas en adolescentes.

OBJETIVOS ESPECÍFICOS

- Abstraer de la literatura psicoanalítica las principales categorías relacionadas con el comportamiento infractor de normas en adolescentes.
- Comparar las principales causas familiares del comportamiento infractor de normas en adolescentes encontradas en la literatura psicoanalítica.
- Caracterizar la muestra de 674 jóvenes escolarizados en Bogotá, entre 12 y 16 años.
- Correlacionar estadísticamente las principales categorías encontradas tanto en la literatura psicoanalítica y no psicoanalítica con el comportamiento infractor de normas en 674 adolescentes escolarizados en Bogotá, de edades entre 12 y 16 años. - Analizar, según las teorías psicoanalíticas, los discursos de jóvenes institucionalizados en el Hogar Sagrada Familia y en la Asociación Cristiana de Jóvenes, identificando posibles relaciones entre su estructura y dinámica familiar y su comportamiento infractor de normas. - Analizar los resultados tanto de la correlación estadística como del análisis del discurso para concluir posibles relaciones entre la estructura y dinámica familiar y el comportamiento infractor de normas en adolescentes.

METODOLOGÍA

Se quiso hacer una investigación mixta (cuantitativa en la primera fase y cualitativa en la segunda) que relacionara dos fenómenos; por un lado, “la estructura y dinámica familiar” y por el otro, “el comportamiento infractor de normas en adolescentes”.

Se realizaron dos etapas en el desarrollo de la investigación:

Primera etapa

De la teoría psicoanalítica se abstrajeron cinco constructos que dan cuenta de estructuras y dinámicas familiares relacionadas con el comportamiento infractor de normas. Estos cinco constructos son: ausencia de un apego seguro, sobreprotección infantil, falta de normas y límites en el hogar, importancia de la socialización, la sobreexcitación de los niños. Igualmente, se abstrajeron tres constructos que dan cuenta del comportamiento infractor de normas en jóvenes; comportamientos agresivos, comportamientos sexuales no normativos y comportamientos infractores asociados a la angustia de separación. Por lo tanto, los primeros cinco constructos componen la variable estructura y dinámica familiar, y los tres últimos constructos componen la variable comportamiento infractor de normas. Como la idea en esta primera etapa fue correlacionar estadísticamente las dos variables antes citadas, se procedió de la siguiente manera:

Estudiantes de psicología y pedagogía, junto con el docente líder de la investigación, quien es magister en Psicología Clínica y Psicopatología Psicoanalítica, esbozaron varios reactivos para nutrir el instrumento tipo encuesta, que permitiera medir las dos variables. Por lo tanto, se diseñaron reactivos para nutrir cada uno de los cinco constructos de la primera variable y los tres constructos de la segunda variable. Posteriormente, se convocó en la Universidad Minuto de Dios un comité de expertos para que evaluaran los reactivos de la encuesta. El comité de expertos aprobó el instrumento e hizo algunas modificaciones. Finalmente, la encuesta pasó una prueba piloto test-retest, obteniendo una excelente consistencia (98 %). La encuesta puede verse en el anexo.

Se aplicaron 674 encuestas a estudiantes con el fin de correlacionar las dinámicas y estructuras familiares con el comportamiento infractor de normas.

Luego se cuantificaron los datos de la encuesta para realizar una correlación estadística (coeficiente de correlación) entre los ocho constructos (cinco de la primera variable y tres de la segunda variable). Igualmente, la encuesta sirvió para caracterizar los 674 jóvenes encuestados en torno a variables pertinentes a la investigación.

Segunda etapa

El método que se empleó en esta segunda etapa fue cualitativo. Primero, y teniendo como soporte las cinco categorías que se abstrajeron de la literatura psicoanalítica, se diseñó una entrevista abierta semiestructurada que pretendía indagar sobre las relaciones tempranas de jóvenes entre 12 y 16 años institucionalizados en programas de restitución de derechos del ICBF y su posible relación con el comportamiento infractor de normas. Estas entrevistas arrojaron discursos que se analizaron desde una metodología cualitativa interpretativa, teniendo como categoría de análisis los cinco constructos antes mencionados. Los investigadores fueron leyendo e interpretando los discursos de los 28 jóvenes institucionalizados a la luz de la teoría psicoanalítica. Es importante mencionar que estos 28 jóvenes fueron escogidos de estas instituciones por haber cometido delitos.

Población y muestra

Esta investigación tuvo como población 28 jóvenes del Hogar Sagrada Familia, de la Asociación Cristiana de Jóvenes (ACJ) y 674 estudiantes entre 12 y 16 años de colegios de Bogotá.

Institución Hogar Sagrada Familia

Esta institución desarrolla su programa de atención a las niñas y adolescentes entre los 8 y 18 años de edad que se encuentren en condición de vulneración. A la fecha, la población se caracteriza por provenir de familias con historia de maltrato, prostitución o adicción, o en las que alguno de sus padres presente alguna inhabilidad considerable para la crianza y el cuidado de ellas.

Asociación Cristiana de Jóvenes (ACJ) Hogar Encuentro

La ACJ Hogar Encuentro brinda atención psicosocial y de restablecimiento de derechos a niños, niñas y jóvenes entre 6 y 18 años, así como orientación para el fortalecimiento de las dinámicas familiares, de modo que genera espacios formativos enfocados en la prevención de riesgos psicosociales como alta permanencia en la calle, consumo de SPA, embarazos en adolescentes, vinculación a grupos de delincuencia, dificultades económicas para el sostenimiento familiar, desatención de los padres en la crianza y bajo rendimiento académico.

Colegios

Se trabajó en los siguientes colegios:

Colegio Alfredo Iriarte, Colegio Atenas, Colegio Instituto Técnico Industrial Piloto, Colegio San José de Castilla, Colegio Diego Montoya Cuéllar, Colegio Inem, Colegio Miguel de Cervantes Saavedra, Colegio Jerusalem, Colegio Itec, Colegio Juan Luis Londoño La Salle, Colegio Colombia Viva, Colegio Rafael Uribe Uribe, Colegio Fabio Lozano Simoneli, Colegio Manuel del Socorro Rodríguez, Colegio Instituto Académico Bethel, Colegio Palermo Sur, Colegio San Gregorio, Colegio Usminia, Colegio Diana Cultivos, Colegio Leonardo da Vinci, Colegio Instituto Tecnisistemas, Colegio Arborizadora Baja.

Discusión de resultados

Etapa cuantitativa

Se realizaron 674 encuestas a jóvenes entre 12 y 16 años, escolarizados en algún colegio de Bogotá.

Análisis del coeficiente de correlación

Hay una correlación positiva baja (0.30 a 0.39) en los siguientes aspectos:

1) Abandono infantil y falta de normas en casa.

2) Abandono infantil y acceso a material sexualmente estimulante o con alto contenido de violencia; o abuso sexual, o violencia intrafamiliar.

3) Falta de normas en casa y acceso a material sexualmente estimulante o con alto contenido de violencia, o abuso sexual, o violencia intrafamiliar.

4) Acceso a material sexualmente estimulante o con alto contenido de violencia, o abuso sexual, o violencia intrafamiliar y comportamientos violentos.

5) Agresividad y comportamientos sexuales no normativos.

6) Agresividad y la sumatoria de todo el puntaje en estructura y dinámica familiar.

7) Ansiedad frente a separación y la sumatoria de todo el puntaje en estructura y dinámica familiar.

Correlación positiva media (0.44)

La sumatoria total de la variable estructura y dinámica familiar y la sumatoria total de la variable comportamiento infractor de normas.

ANÁLISIS DE LOS RESULTADOS CUANTITATIVOS

Constitución familiar

Se aprecia que en la muestra de 674 jóvenes el 42 % reporta que sólo vive con la mamá. Sin duda, este dato pone de relieve la alta tasa de familias monoparentales en Colombia, que tienen como cabeza de hogar a la madre. El “Mapa mundial de la familia 2013”, realizado en 47 países por el Child Trends Institute y la Universidad de Piura en Perú, indica que en Colombia el 35 % de los niños viven sólo con la madre. Si se toma este dato en consideración, se puede indicar que en nuestra muestra poblacional es relativamente alto el índice de jóvenes en tal situación.

Esta nueva configuración familiar de tipo monoparental, con madres cabeza de hogar, de la que Colombia parece ser pionera a escala mundial, hace eco en los planteamientos del psicoanálisis que indican un cambio en la estructuración mental (de tipo limítrofe) debido a la caída de la figura paterna y, por lo tanto, el debilitamiento de la autoridad.

Si se analizan los datos con respecto a cuál es el objeto primario (aquel que ejerce principalmente la función de cuidado y protección) de estos jóvenes, el 69,58 % indicó que era su mamá, el 15,13 % su abuela, y tan sólo el 4,90 % el padre. Parece ser que, en las nuevas familias colombianas, de un modo alarmante, el lugar del padre está perdiendo protagonismo.

Se esperaría que el objeto castrante (aquel que ejerce principalmente la autoridad) estuviera ocupado principalmente por el padre, pero los resultados muestran que, para estos jóvenes, el 61,20 % reconoce a la madre como su objeto castrante, el 38,90 % considera que es su papá y el 6,10 %, su abuela.

Estos datos permiten afirmar que en la actual estructura familiar colombiana, la madre cumple el papel más importante y estructurante, seguida por el padre, quien pierde su lugar de forma acelerada y está siendo sustituido por la misma madre y también por la figura de la abuela.

Violencia

Es inquietante que en la muestra poblacional, de 100 jóvenes, siete reporten violencia intrafamiliar. Varias investigaciones señalan que la violencia puede ser aprendida por imitación, y una tasa del 7 % de violencia intrafamiliar es un dato para tener en cuenta.

Si, por otro lado, se analizan los comportamientos violentos de los jóvenes, se encuentra que el 9 % de ellos indican que se golpean a sí mismos, el 5 % por ciento reporta intento de suicidio, y el 5 % no responde. Finalmente, el 13 % manifiesta haber pensado en suicidarse.

Si se considera que al menos uno de cada diez jóvenes ha pensado en suicidarse, y que de éstos, la mitad lo han intentado, cabe prender las alarmas frente al comportamiento autoagresivo. Sobre todo, si se ponen en contexto estas cifras. Frente a la última década, las autolesiones fatales en Colombia tuvieron un aumento de más del 10 % y se situaron en el cuarto lugar de muertes violentas en Colombia. El índice de suicidio nacional es de 5,22 por cada 100.000 habitantes mayores de cinco años. La muestra de esta investigación parece estar en sintonía con el porcentaje de suicidio a escala nacional (alrededor del 5 %).

Abuso sexual

Las cifras que arroja esta investigación frente al abuso sexual indican que el 5 % de jóvenes encuestados reporta haber sido abusado sexualmente (el 3 % no responde); de ellos, 76 % son mujeres y 24 % hombres; 65 % dice que el victimario ha actuado fuera de la casa y 35 % dentro de la casa; 3 % de esos jóvenes han sido abusados más de una vez, mientras que otro 3 % no responde; el 94 % de los que han sido abusados, sólo lo experimentaron una vez.

Estas cifras difieren parcialmente de las halladas a escala nacional, las cuales reportan que el 85 % de menores de edad abusados son mujeres. Igualmente, según cifras del Instituto de Medicina Legal, lo más usual es que el abusador esté dentro del hogar y que el abuso haya sido reiterado.

Respecto de los comportamientos sexuales no normativos, sólo el 4 % ha reportado haber sido acusado de tocar partes íntimas sin el consentimiento de la persona y el 2 % reporta haber enviado fotos íntimas sin el consentimiento del receptor.

Adicciones

En cuanto a las adicciones, el 16 % de mujeres reportan haber tomado licor, mientras que sólo el 11 % de hombres lo hace. Llaman la atención estas cifras, que se confirman con el consumo de cigarrillo: 7% de mujeres reporta haber fumado frente a apenas un 5 % de hombres.

Con respecto al consumo de sustancias psicoactivas ilegales, 10.1 % de jóvenes reportan haber consumido sustancias psicoactivas ilegales. De ellos, el 5.1 % son mujeres, y el 5 % hombres.

La principal droga es la marihuana, con el 8.5 %. Le siguen drogas como el pegante, la cocaína, disolventes (dick), nitrito de butílico, nitrito de amilio y nitrito de isobutilio (popper), drogas sintéticas como el LSD (trips). Todas con el 2 %.

Llaman la atención tres aspectos de estos datos:

a) En el consumo de alcohol y cigarrillo, y ligeramente en el de sustancias psicoactivas ilegales, las mujeres reportan mayor consumo que los hombres.
b) La marihuana sigue siendo la droga más consumida entre los jóvenes de la muestra: prácticamente cuadriplica otras.
c) De cada diez jóvenes, uno ha consumido sustancias psicoactivas ilegales.

Pero, sin lugar a dudas, el dato más llamativo de las encuestas es que el 53 % de jóvenes reporta tener adicciones distintas a las drogas, como al juego, internet, videojuegos y televisión.

Decir que más de la mitad de jóvenes reportan algún tipo de adicción (o varias) pone gran énfasis en su estructura mental. Para el psicoanálisis, la conducta de un funcionamiento limítrofe está caracterizada por el rompimiento de normas, y las acciones de riesgo y agresión. Que más de la mitad reporte adicciones, que de diez jóvenes, uno haya consumido sustancias psicoactivas ilegales, que el 5 % de ellos haya intentado suicidarse y el 13 % lo haya pensado, sumado a que el 9 % manifiesta haberse golpeado a sí mismo, indica una alta tasa de comportamientos limítrofes. Si se considera que la estructura familiar está en cerca del 42 % como familias monoparentales compuestas por la madre, y que el padre se ve cada día más desdibujado, tanto en su función de protección como en la de autoridad, cabría resaltar la relación entre la estructura familiar y dichos comportamientos problema.

Correlación de las dos variables

Se encuentra que no existe ningún tipo de correlación alta, ya sea positiva o negativa. Se debe reconocer que se esperaba una correlación alta positiva entre las dos variables (estructura y dinámica familiar y comportamiento infractor de normas). Esta correlación, si bien fue positiva, no fue alta, sino media: de 0.44. Esto puede indicar que, aunque el comportamiento infractor de normas sí está relacionado con la estructura y dinámica familiar, parece ser que no es la única variable que influye (situación reconocida en los primeros párrafos). Infinidad de variables aparecen en este momento como posibles para explicar el comportamiento infractor de normas: quizá el contexto cultural, las variables económicas, el acceso a calidad educativa, la influencia de pares, e incluso las de índole genético, son todas posibles. Desde el principio de esta investigación se aseguró que no se pretendía reducir el comportamiento infractor de normas de jóvenes a la estructura y dinámica de sus familias. A continuación, se detallará la correlación de estructuras y dinámicas familiares con el comportamiento infractor de normas.

Al parecer, el abandono familiar está relacionado con otro constructo de la misma variable (estructura y dinámica familiar), que consiste en la falta de normas en la casa. Familias abandónicas, con frecuentes rupturas en sus lazos, presentan dificultad en el establecimiento de normas. Necesariamente, para el psicoanálisis la primera característica para que la ley paterna se pueda establecer es que exista con anterioridad una vinculación afectiva y estable del sujeto con un objeto primario. También es natural para el psicoanálisis que familias con poca vinculación afectiva presentaran enormes dificultades en el establecimiento de normas.

Igualmente, hay otro constructo que se encuentra correlacionado con el abandono infantil y es el del acceso a material sexualmente estimulante o con alto contenido de violencia, o abuso sexual, o violencia intrafamiliar. Si se comprende que en estas familias abandónicas, el establecimiento de normas en casa es muy difícil, se esperaría que poner límites a las pulsiones va a ser, per se, una tarea titánica. Por lo tanto, la teoría psicoanalítica es coherente con el hallazgo de una correlación entre el abandono infantil, la dificultad en el establecimiento de normas y el acceso a material sexual o violento, y la presencia de abuso sexual o violencia intrafamiliar.

El psicoanálisis ayuda a comprender este fenómeno: si no existe un vínculo afectivo primario, es decir, un apego seguro y estable, no podrán establecerse límites en el hogar, y la presencia de pornografía, videojuegos violentos, abusos sexuales y violencia intrafamiliar serán frecuentes. Ninguna norma (ni la primaria de prohibición del incesto) serán configurables mentalmente si no se cuenta con un primer apego. Un niño abandonado necesariamente viene de familias incapaces de ofrecer este apego seguro y estable, y por ende es más propenso al desbordamiento pulsional, al mundo sin límites, al abuso sexual, a las auto y heteroagresiones, al ambiente sin normas, sin ley.

Etapa cualitativa

Después de revisar cada una de las 28 entrevistas, las tablas de categorización que se asignaron a cada una, así como los respectivos análisis dinámicos de las entrevistas, se han encontrado múltiples y diferentes elementos que desde la teoría psicoanalítica permiten inferir que la estructura familiar, que es la base del desarrollo de la personalidad, en estos casos está relacionada con las dificultades que presentan los menores entrevistados, en el cumplimiento y seguimiento de normas, problemas de rebeldía e indisciplina, de violencia hacia ellos mismos y con sus pares, consumo de sustancias psicoactivas, huida del hogar, casos de delincuencia, entre otros.

Se observó que las familias de estos chicos son, en su gran mayoría, fragmentadas, ya sea por ausencia de la madre o del padre. En algunos casos, tampoco hay sustitutos estables de una o ambas figuras paternas, y suele haber varios cuidadores para el mismo menor en diferentes tiempos.

Fue así como se pudieron evidenciar las falencias de estructura y dinámica familiar que existen en el contexto de estos grupos. Sin ignorar la situación socioeconómica, que en la mayoría de los casos tratados es crítica, y la falta de oportunidades que los rodea. Es conveniente resaltar la importancia que tienen para la formación de la personalidad, la capacidad de seguir y cumplir las normas sociales: la responsabilidad, la disposición y el compromiso por parte de las figuras materna y paterna o cuidadores en los primeros años de vida. Estos aspectos son elementales para el desarrollo de la personalidad, así como el aprendizaje de reglas, los límites y el respeto por los otros, que les permitirá a lo largo de la vida desarrollarse en comunidad, cumplir las reglas o atender instrucciones.

Como se pudo evidenciar en las entrevistas, la mayoría de los casos en los que hay infracción de normas o comportamientos antisociales en los chicos, están muy relacionados con la carencia de una relación sólida o estable con sus figuras paterna, materna o con sus cuidadores.

CONCLUSIONES

Tras el desarrollo de este proyecto se pueden dilucidar varios aspectos relevantes en cuanto a la relación existente entre las nuevas formas de hacer familia y el comportamiento de infracción de normas por parte de niños, niñas y jóvenes.

Dado lo anterior y de acuerdo con el psicoanálisis, según el cual la familia es un fundamento de desarrollo de la personalidad, el impacto se ve directamente relacionado con la serie de dificultades que presentan los jóvenes y niños de la muestra frente a su poca capacidad para cumplir las normas establecidas por el sistema social en el que se encuentran.

Las relaciones familiares durante la infancia suscitan muchos de los comportamientos de la adolescencia y la juventud. En relación con la conflictividad familiar, se destaca que en la adolescencia temprana suelen aparecer algunas turbulencias en las relaciones entre padres e hijos. En la mayoría de familias de los jóvenes entrevistados estas relaciones siguen siendo caóticas, ya que los conflictos alcanzan una gran intensidad. Igualmente, estas nuevas formas de hacer familia (declive del papel paterno y, lo más preocupante, ausencia de apegos seguros y estables primarios) inciden (se reitera que no es la única causa) en el comportamiento de los jóvenes. ¿Qué tipo de comportamiento caracteriza a los jóvenes encuestados y a los entrevistados?

Se encontraron básicamente dos tipos de comportamiento característicos:

1) Comportamientos auto y hetero agresivos (cutting, riñas).
2) Comportamientos de adicción. En la adicción a sustancias psicoactivas, legales (licor y cigarrillo) y ligeramente en las ilegales (especialmene marihuana), el consumo es mayor en las mujeres. Cerca del 10 % de jóvenes consumen estas sustancias. En otras adicciones (videojuegos, internet, televisión), más de la mitad de jóvenes encuestados reconocieron padecerlas. Una cifra más que preocupante.

En cuanto a la indisponibilidad del objeto primario, se destacó la importancia de la relación con éste, ya que de allí se resuelven muchos factores de la personalidad y las conductas que asumirán los jóvenes en el futuro. Esto se evidencia en el caso de las institucionalizaciones, factor evidente en la mayoría de los niños y niñas entrevistadas, debido a que en muchos de los hogares de estos menores se encontraron múltiples casos en los que la madre o algún sustituto estable no estuvieron en los primeros años de desarrollo.

Se puede, igualmente, concluir que la sobreprotección (o en términos psicoanalíticos, el objeto primario absorbente) y la falta de socialización (en términos psicoanalíticos, carencia de objetos sustitutos), no fueron, ni en el análisis cualitativo ni en el cuantitativo, categorías relevantes para explicar el comportamiento infractor de normas.

Finalmente, el desbordamiento pulsional se evidencia en los casos de algunos niños que tienen desde su más tierna infancia eventos que desbordan y sobreexcitan sus pulsiones, lo cual impediría que el sujeto se frustrara y renunciara al objeto primario.

En esta categoría se pudieron enmarcar algunos de los casos que se hallaron, ya que en los entornos de los entrevistados había violencia, delincuencia, consumo de sustancias psicoactivas.

En síntesis, se puede concluir:

1) Tanto en el análisis cualitativo como en el cuantitativo, la estructura y dinámica familiar que más estuvo relacionada con el comportamiento agresivo, y de tipo adictivo, fue la falta de un apego primario seguro y estable. Es decir, el abandono de un niño o niña parece ser lo más perjudicial en todas las causas del comportamiento infractor de normas.

2) Ni en el análisis cualitativo ni en el cuantitativo la sobreprotección ni la falta de socialización (quizá porque no la hubo) parecen tener relevancia para explicar el comportamiento infractor de normas.

3) En el análisis cualitativo y en el cuantitativo, la falta de normas en la casa, reforzada por la caracterización en la que sobresalía el declive de la figura paterna, está relacionada con el comportamiento agresivo y de tipo adictivo. Es decir, en segunda instancia (después del abandono familiar) la falta de normas en casa parece tener gran importancia a la hora de explicar el comportamiento infractor de normas.

4) La figura de la madre es la más importante en las nuevas familias (42 % de los jóvenes viven sólo con ella), seguida de la de la abuela y en tercer lugar la del padre. La abuela supera con creces la importancia del padre en el establecimiento de un apego seguro y estable.

5) En el análisis cualitativo, parece ser que las mujeres son más propensas al consumo de sustancias psicoactivas legales y ligeramente más propensas a las ilegales.

6) La sustancia psicoactiva ilegal más consumida por los jóvenes de la muestra es la marihuana, pues cuadriplica casi a cualquier otra.

7) El 53 % de los jóvenes encuestados manifiestan tener adicciones distintas a las sustancias (videojuegos, internet, televisión, juego).

8) El trastorno psiquiátrico que más reporta la muestra poblacional es la depresión.

9) Cerca del 13 % de jóvenes ha pensado en el suicidio, pero solo el 5 % lo ha intentado; un 5% no responde.

10) La mayoría de niños, niñas y jóvenes abusados sexualmente siguen siendo mujeres; sin embargo, en la muestra se concluye que el agente abusador no es del interior del hogar sino externo a él. Mas del 90 % de los jóvenes abusados, sólo lo han sido una vez.

11) La estructura y dinámica familiar tiene una correlación positiva de 0.44 (media) con el comportamiento infractor de normas. Si bien se debe reconocer que se espera una correlación mayor, este resultado invita a nuevos investigadores a ahondar en otras causas para explicar el comportamiento infractor de normas.

SUGERENCIAS

Los resultados hallados en este proyecto han confirmado la relación que existe entre el núcleo familiar, las pautas de crianza y el rompimiento de normas. Los entrevistados y los encuestados han otorgado una perspectiva más clara de estas situaciones y han corroborado aquellas teorías psicoanalíticas en las que se establecen los efectos de la relación mencionada. Por todo esto y con la posibilidad de aportar objetivamente a la población tratada en el presente proyecto, se exponen estas sugerencias, que se espera sean útiles y contribuyan a generar dinámicas familiares más saludables.

Núcleo familiar

En vista de los acontecimientos que hacen vulnerable cada núcleo familiar, entre los que se encuentran la separación, la unión con una pareja ajena al hogar, la sustitución de responsables frente a un menor, entre otros, se sugiere que en los hogares se priorice el establecimiento de un apego seguro y estable, independiente del cuidador. Si por diferentes motivos, un menor queda al cuidado de su abuela, es importante que luego no se rompa este apego, y pase al cuidado de su madre biológica. Sin lugar a dudas, parece como si se estuviera sugiriendo una irresponsabilidad con los padres biológicos, pero no se deben desconocer los resultados, los cuales indican que lo que más genera disrupción en la formación mental de un niño es no establecer un apego seguro y estable con una persona. Si el menor ya formó este apego seguro y estable con una tía, la abuela u otro cuidador, y luego la madre o el padre biológicos desean recuperar la custodia, no se debe romper la relación previamente formada. El nuevo cuidador debe introducirse paulatinamente sin romper, ni imponer la prioridad, de la relación previa que el menor había establecido. Es fundamental hacer énfasis en que incluso legalmente tienen prioridad los derechos de los niños sobre los de los padres a recuperar la custodia.

Es importante que en un núcleo familiar haya estabilidad de la persona a cargo, es decir, que quien hace el papel de sustituto o los padres primarios sean conscientes de la responsabilidad que tienen sobre un menor, y no sólo garanticen sus derechos sino que enseñen a respetar las normas, con castigos claros y prudentes, que no vayan en contra de la norma y de la integridad física y psicológica del menor; un menor que aprende se neurotiza correctamente, es decir, controla sus pulsiones, es menos vulnerable ante las circunstancias que lo priven de su libertad o amenacen su integridad. O sea que un menor que aprende en el hogar a controlar su ansiedad y sus impulsos es más fuerte a la hora de asumir decisiones sobre transgresión de normas, por lo cual no las quebrantará. Lo anterior es precisamente sobre lo que se deben educar los núcleos familiares, por ello se sugiere estos se capaciten y se concienticen sobre la importancia y la correcta forma de educación.

La tasa de divorcios está disparada actualmente; las parejas son menos estables que antaño. Esto puede obedecer a muchas circunstancias. Por esto se les sugiere a las nuevas familias reflexionar sobre las consecuencias psicológicas que estas rupturas pueden tener en niños, especialmente si son muy pequeños. Una familia sólida y estable, compuesta ya sea de modo heteroparental u homoparental, sean extensas e incluso monoparentales, son idóneas para que un niño crezca. Lo perjudicial es el rompimiento de las relaciones dentro de la familia y los cambios constantes en su configuración.

Existen actividades recomendables y no recomendables para formar una mente sana, y esto se deriva de la presente investigación, en la que se implica la autoridad de un adulto y el compromiso de un menor. Entre las actividades recomendadas se sugieren charlas constantes entre padres e hijos, en las que se aborden todo tipo de temas y se deje claro lo que conviene para el menor, se conozcan las consecuencias detrás de cada acción o de la satisfacción de ciertos impulsos. Se recomienda enriquecer la autoestima del menor y fortalecer su seguridad y su autoconfianza, para que sea menos vulnerable a situaciones como el bullying y trastornos como la depresión.

En cualquier decisión que tome una institución sobre el futuro de un menor de edad (establecimiento de custodias, medidas de institucionalización con fin de restablecimiento de derechos) se debe priorizar el mantenimiento y la protección de las relaciones afectivas, seguras, estables y no tóxicas, que el menor haya logrado con determinadas personas. Si, por ejemplo, un menor de edad ha estado sus primeros tres años de vida al cuidado de su abuela y ahora uno de los padres biológicos quiere recuperar la custodia porque ha superado las condiciones que le imposibilitaron hacerlo (por ejemplo, la de ser habitante de la calle o haberse enfrentado a la drogadicción o el desempleo), no se le deba dar la custodia a este nuevo cuidador, sea cual sea la situación, si el menor goza de un apego seguro y estable, y el primer cuidador no lo maltrata de ninguna forma. En Colombia, legalmente priman los derechos de los niños y niñas, y en ese sentido, prevalece el derecho del menor de edad a crecer manteniendo su relación estable segura (que, como quedó expuesto, es muy importante para la estructuración mental) que el derecho al nuevo cuidador de ser padre o madre y recuperar a su hijo. Por supuesto, se reconoce lo importante que es para el menor de edad conocer y comenzar a establecer vínculos afectivos con sus padres biológicos (si éstos no han sido su principal cuidador) y una medida institucional debe siempre ir con miras a permitir espacios para que hijo y padres biológicos se rencuentren y generen vínculos afectivos, pero de ninguna forma se debe vulnerar, separar o disminuir el apego seguro y estable que el menor ha generado con su antiguo cuidador. Se podría pensar que se está fomentando la irresponsabilidad de los padres biológicos, o dificultando que asuman su compromiso, al sobrecargar a los abuelos, pero se reitera que la salud mental del menor de edad prima sobre cualquier otro aspecto.

Cuando un menor de edad es desplazado a una medida de institucionalización, porque el estado colombiano considera que su familia es tóxica o no idónea para el menor de edad, y si esta medida es permanente y final, se sugiere buscar lo más pronto posible una familia de adopción que le ofrezca al niño la posibilidad de generar este apego seguro y estable. Si la medida no es definitiva, se debe ayudar a que la familia original del menor de edad se forme, se capacite y se convierta en el menor tiempo posible en una núcleo idóneo para recuperar al menor de edad. En este proceso de enseñanza familiar es muy importante un equipo psicosocial competente para llevar a la familia a cambiar.

Si el niño permanece muchos años en una institución, es posible indicar, como primera medida, que no es lo ideal para él, pero si esta situación es obligatoria, se debe permitir el mayor acercamiento del menor de edad con su familia, supervisando que no se vuelvan espacios tóxicos (que el niño vaya a pasar Navidad con su familia, y ésta lo agreda, o abuse de cualquier forma de los derechos del infante). Finalmente, si la institucionalización será la forma de vida de este menor de edad, las instituciones deben capacitar a sus funcionarios sobre la importancia del apego seguro y estable primario, que seguramente estos menores intentaran hacer con ellos, y especialmente no cambiar de personal constantemente. Infortunadamente, se evidencia que el personal de las instituciones que reciben niños es muy cambiante, y parece que los profesionales rotan según el gobernante de turno.

Por último, se reitera que las instituciones no son el lugar idóneo para que un niño viva. Se sugiere recuperar y construir programas que ubiquen al menor de edad en familias receptoras, como el programa de madres comunitarias que se tenía antaño, o el de Aldeas Infantiles S.O.S. Es muy importante no sólo separar al menor de edad de su familia tóxica (es lo que hacen las instituciones), sino ofrecerles una familia sustituta, en la que el niño encuentre una figura maternal amorosa que le permita estructurarse como un ser humano idóneo. En Francia existen famillesd’acuille (familias de recepción) que reciben recursos económicos del Estado, y capacitaciones constantes, y acogen a los menores de edad que han sido separados de sus núcleos originales.

Para los autores, como profesionales en psicología y pedagogía, la situación ideal de un menor de edad que ha debido ser separado de su familia natural es vivir en una familia en la que exista la figura de madre comunitaria, quien recibe recursos económicos y capacitaciones del Estado, que es estable (no están cambiando de personal en cada gobierno de turno), y el menor vive allí, en un ambiente familiar, y va a la institución educativa regular. Igualmente, cuenta con el apoyo de profesionales, como psicólogos y trabajadores sociales, ojalá recibiendo visitas seguidas pero supervisadas de su familia natural.

Bibliografía

Bion, W. R. (1999). Seminar held in Paris. July 10, 1978. Transcribed by Francesca Bion Sept.

Carvajal, C. A., Fagua, J. C., & Zamudio, E. G. (2010). Estudio nacional de consumo de sustancias psicoactivas en adolescentes en conflicto con la ley en Colombia 2009. Gobierno Nacional de la República de Colombia, Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) y Dirección Nacional de Estupefacientes—DN

Drieu, D., Horrière, Y., Sarabian, S. & Vilquin, G. (2010). De la suppléance familiale aux pratiques de médiation avec les adolescents vulnérables. Réflexion à partir d'une monographie institutionnelle » (De la suplencia familiar a las prácticas de mediación con los adolescentes vulnerables, Reflexión a partir de una monografía institucional. Bulletin de Psychologie, 63(5), pp. 361-370.

Ferenczi, S. (1932). Confusión de la lengua entre el adulto y el niño. El lenguaje de la ternura y de la pasión. XII Congreso Internacional de Psicoanálisis. Wiesbaden, Alemania.

Flavigny, H. (1977). De la notion de psychopathie. Revue de Neuropsychiatrie Infantile, 25(1), pp. 19-75. (Sobre la noción de psicopatía, en Revista de Neuropsiquiatría Infantil).

Freud, S. (1920). Más allá del principio de placer, psicología de las masas y análisis del yo, y otras obras (1920-1922). Volumen XVIII.

Klein, M. (1984). Psicoanálisis del desarrollo temprano. Barcelona: Ediciones Paidós.

Laplanche, J. (2007). Problematiche VI. L'Après-Coup.

Mahler, M. (1984). Estudios 1: Psicosis infantiles y otros trabajos. Buenos Aires: Paidós.

Proia, N. & Desquesner, G. (2011). Le sujet “incasable”, entre psychopathologie et limite institutionnelle. Jeunesses en difficulté. Revue pluridisciplinaire de recherche. Dossier 12.

Roussillon, R.(1991). Paradoxes et situations limites de la psychanalyse (paradojas y situaciones límites del psicoanálisis). PUF.

Wallerstein I. (2006). Análisis de sistemas-mundo. Una introducción. Madrid: Siglo XXI Editores.

Winnicott, D. (1972). Realidad y juego. Trad.: F. Mazía. Barcelona: Gedisa.

Final del extracto de 29 páginas

Detalles

Título
Análisis de la estructura, la dinámica familiar y el comportamiento de infracción de normas en adolescentes de Bogotá
Autor
Año
2017
Páginas
29
No. de catálogo
V430751
ISBN (Ebook)
9783668753341
ISBN (Libro)
9783668753358
Tamaño de fichero
624 KB
Idioma
Español
Palabras clave
análisis, bogotá
Citar trabajo
Camilo Eduardo Arenas Mozo (Autor), 2017, Análisis de la estructura, la dinámica familiar y el comportamiento de infracción de normas en adolescentes de Bogotá, Múnich, GRIN Verlag, https://www.grin.com/document/430751

Comentarios

  • No hay comentarios todavía.
Leer eBook
Título: Análisis de la estructura, la dinámica familiar y el comportamiento de infracción de normas en adolescentes de Bogotá



Cargar textos

Sus trabajos académicos / tesis:

- Publicación como eBook y libro impreso
- Honorarios altos para las ventas
- Totalmente gratuito y con ISBN
- Le llevará solo 5 minutos
- Cada trabajo encuentra lectores

Así es como funciona